viernes, 4 de diciembre de 2009

Pulp 1

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El espacio y el tiempo se expanden en estructuras binomicas. Si y no. Todo y nada.

Un hombre es sus circunstancias y sus decisiones. Punto. ¿Crees que hay algo seguro?
Mira más allá de esta crisis, más allá del último siglo, y verás incertidumbre, voluntad y evolución.

Vuelvo de un viaje al país de los sueños. Me encontré conmigo mismo y me di la mano. Tanto tiempo de bronca: Era más una pose que una actitud razonada. El pecho me palpita y ambos sabemos por lo que es.

Hay un hombre del pasado en cada esquina, acechando para echarte encima todos los putos fantasmas de tu vida: Las broncas en clase, el dinero para la iglesia que te gastabas en tazos, o esa mierda que le dijiste a tu padre aquella vez...

A mi regreso a la ciudad, hice repaso de logros y fracasos. Acumulé mi pasado en la acera y oriné sobre él.

Después salí a dar una vuelta, y a comer comida mexicana.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Despertando

Nada importa, a la luz del amanecer.

Nuestras ansias se desvelan como tontas ambiciones sin horizonte final, y gusano, tierra y silencio pasan a ser nuestros familiares.

Las mentiras y los cuentos llenan de significado nuestras vidas infantiles. De pequeño veía ballenas en el trayecto hacia Avila. ¿Debería perseguir ballenas el resto de mi vida?

Los cuentos y la mente nos engañan, y nos dan un mundo de sueños donde habitar.

Y si pudieras salir de ese mundo de castillos y hadas... ¿Verdaderamente lo harías?
No hay cosas mucho mejores allí fuera. Solo la realidad.

sábado, 29 de agosto de 2009

Héroes

Las risas se agotan y la marea regresa. En esos momentos, hasta la tonta felicidad del rastro te puede parecer jodidamente mejor que seguir peleando.

En los cómics es distinto: Los héroes dan una paliza al malo y salvan al mundo, y auque nadie lo sepa, en el fondo todo el mundo esta agradecido. Y hay risas al final y ahí acaba todo.
Final feliz y besos, joder.

En la vida real todo es más difícil, porque hay que llegar a salvar el mundo y mantenerse, y aguantar la caída y los momentos de bajón y, si eres lo suficientemente fuerte, respetas tus propios principios y no te conviertes en el malo de la historia.

Así pues, según se mire tiene mucho más merito y mola más ser una persona normal. Mucho mejor que el hijo de puta de Superman, que solo es un tipo con leotardos y unos poderes que te cagas de buenos.

Porque a largo plazo todos somos humo y polvo, y lo que importa de veras son las decisiones que tomaste y los cojones que pusiste para hacer bien las cosas. Y eso no es algo que nadie te pueda quitar.
Ni el puto Lex Luthor, joder.

martes, 25 de agosto de 2009

Miedo y rabia

Como satélites en orbita, nos movemos y relacionamos según reglas ya escritas.

A veces, a base de fuerza de voluntad ignoramos las reglas y cambiamos el curso de los eventos, pero en esencia, cambiar las reglas es un acto agotador con tendencia a la futilidad.

Existe el equilibrio y existe la ecología en nuestras acciones. Y aquel que por mera soberbia intente violar las dinámicas ya establecidas, es un necio y malgasta sus fuerzas buscando humo.

Los grupos y las empresas, como organismos, tienen sus cadencias, sus dinámicas particulares, sus santos y sus demonios. Así, cada grupo es un mundo de fuerzas inestables que se alimentan entre sí, y la forma más tonta (y normalmente la más común) de joderlo todo es quitar uno de los tornillos a la máquina y esperar, con cara de iluso convencido, a que todo el edificio se venga abajo.

Yo sé esto. Soy listo y veo. Pero saber y ver no valen una mierda cuando lo que desearías es meter una palanca en el engranaje de la realidad, cambiar el mundo y corregir algunas putadas.

Y cuando tenga las suficientes pelotas, y aprenda a ver realmente bien, agarraré por sorpresa a la Muerte una noche y le diré algo del estilo: -A ver, hija de puta, dime por qué te llevaste a mi perro y a mi abuelo...
Y escucharé lo que tenga que la Muerte tenga que decir.
Porque puedo ser un capullo sin paciencia, y un soberbio que echa de menos a su abuelo muerto, pero no soy tan capullo como para no escuchar lo que la gente dice, aunque sea una tramposa tan grande como la Muerte.

jueves, 20 de agosto de 2009

Silencio y risas

Un juego de cartas a varias tandas: El pequeño mira la partida, pero no entiende, y es amablemente invitado Por los mayores.

El dinero es lo primero, y es lo segundo. Y cualquier imbecil empieza a plantarse qué coño pinta el tema del trabajo en todo ello.
El trabajo, si tienes suerte, recubre toda la búsqueda con un halo de ritual y moralidad, porque el dinero viene y se va, y si no tienes algo a lo que aferrarte, el vacío que acecha puede arrancarte las pelotas de un zarpazo.

Pero, supongo, deben haber docenas de formas de lograr dinero, para quien posea audacia y no le importe arriesgar el alma.
Así, la mesa de juego siempre está abierta a nuevas apuestas, y los adultos juegan y los niños miran, fascinados por los gestos de los mayores y el juego y las apuestas, y el vacío donde aguarda la nada, esperando la caída de todos y cada uno.

domingo, 16 de agosto de 2009

El amnios

Toboganes y columpios.
Lacasitos en el suelo, callados cómplices de la gula liberadora.

El mundo se mueve a mis espaldas: Sonidos veloces que cortan el aire. ¿En qué año estoy? La cuarta dimensión se escapa fluida entre mis dedos, apenas perceptible por mis sentidos.

Viajero de los sueños, soy joven y soy viejo. Anclado por el azar al parque de todas nuestras infancias, donde nuestras primeras sonrisas y berrinches quizás nos definieron para siempre.

Ante mí veo un niño jugando. Épicos esfuerzos por encaramarse a una de las extrañas estructuras lúdicas que el ayuntamiento instala, y me pregunto calladamente si ese niño eres tú o soy yo, y si aún conservamos alguno de los dos la locura y la magia que ese niño posee.

Pero el tiempo se acaba, y soy absorbido de nuevo al espacio sin nombre, donde una vez nos encontramos, y nos encontraremos todos al final.
La fábrica de lacasitos, toboganes y columpios. Y estructuras lúdicas aún más extrañas donde demostrar nuestro aguante y locura...

domingo, 9 de agosto de 2009

Dentro del perimetro

La lluvia caía indolente en la superficie de cemento y alquitrán de la base, formando charcos irregulares.

Rubén fumaba en la noche, a escasos metros de la entrada norte del edificio central, junto con uno de sus compañeros.
Los trajes impermeables de color verde resultaban demasiado grandes e incómodos y ocultaban de manera periódica las facciones de los técnicos. Objetivamente y bajo la luz del tenue foco, pensó el joven, debían tener aspecto de auténticos gilipollas.

-He presentado mi carta de renuncia.- Reveló Sergi -El próximo mes regreso a casa.

La noticia explotó como una granada en el ánimo de Rubén.
-Esa es una noticia de mierda.- Le acusó, intentando establecer contacto visual: Sergi se mostraba indiferente y cansado.
-Supongo. Me he cansado de viajar y mojarme el culo.- Su rostro se ganó la empatía de su interlocutor, que terminó por asentir comprensivo. -Te echaremos de menos.

Ambos hombres se observaron en silencio.
Rubén recordaba una docena de historias y anécdotas. Toda la pandilla usando los proyectores holográficos de Formación para ver la liga de futbol mundial, Sergi y él hackeando los cortafuegos y barreras corporativas para hablar vía Net con sus familias...
A distancia vio a Mike, el jefe de seguridad del proyecto, dando una revisión rápida al perímetro, comprobando las alambradas y los sensores.

Sergi retomó conversación, incomodo con el silencio. -En realidad pensé que tú también te irías. Después de lo de Diego.

-El intento de suicidio de Diego fue una mierda muy grande.
Fallo de selección, error de Recursos Humanos. Llueve sobre mojado.- Sergi pareció disfrutar de la crítica a los memos de la estructura corporativa, y rió calladamente, echando la cabeza hacia atrás.

Una vez recuperó el equilibrio, prosiguió el hilo:
-Este proyecto es basura y lo sabes. Hace semanas que este lugar se esta viniendo abajo.
-Un proyecto de mierda en un lugar de mierda. ¿Que hay de nuevo? ¿Sabes como estaban las apuestas en la central cuando vinimos? 5 a 1 a que este asunto caía en dead end antes de 3 meses. Y lo hemos hecho, joder. Durante un año. Todos los putos días...

Esta última parte pareció devolver el ánimo a su compañero, que esbozó una sonrisa torcida. -Somos buenos, ¿verdad?
-Somos buenos, joder. Jodido brillo condensado y encerrado en trajes baratos...
Su compañero volvió a reír, con ganas, olvidando la selva, los reportes y demás basura. Rubén mantuvo una sonrisa franca y triunfante.
Le gustaba ver reír a su amigo. Le hacía sentir menos frío en su interior.

En la periferia de su rango de visión creyó ver un conejo gigante de color amarillo. Un pequeño escalofrío le sacudió.
Quizás no sea nada, se dijo. Quizás solo sean los efectos secundarios de la droga estimulante que llevamos consumiendo desde hace meses.
En cualquier caso, ver Bugs Bunny gigantes no tenía importancia. Ninguna importancia.
En las últimas semanas había visto cosas peores.

Sentía que la paranoia se iba convirtiendo poco a poco en su traicionera compañera de cama. Y para colmo, al paso que iban las cosas, dentro de poco ni siquiera tendría nadie con quien salir a echar un cigarro a las 2 de la mañana...

Jodido, ¿verdad?

domingo, 26 de julio de 2009

Mynameis

La mayoría de la gente apenas cambia a lo largo de los años.

Física, mental y emocionalmente, tendemos a ser herederos de lo que nos ocurre y lo que aprendemos en los primeros años de nuestra vida.

Ahora se habla de Marca Personal, y hablamos de etiquetas como una nueva forma de analizarnos y mejorar nuestro desarrollo profesional.
Pero corremos el riesgo de que la nueva visión y perspectiva alcanzada solo sirva para crear nuevos casilleros donde prefijarnos, nuevas jaulas para el caos de lo inestable, y lograr un espacio más para regodearnos en la autocomplacencia de nuestros propios errores y defectos.

-Yo soy así - dice el necio. Y el resto del mundo sonríe y asiente, satisfecho y tranquilo...

El Mundo es complejo y dinámico, en constante cambio. Y una marca personal que no sea lo sufientemente abierta y multidinámica para adaptarse a él solo servirá para limitar nuestra propia eficiencia , ponernos de nuevo las trabas que, parece ser, nos acompañan como pegajosos familiares durante todo nuestro camino vital y, en esencia, lastran la evolución a la que tenemos derecho.

Y ahora olvida. Emborráchate de ruido y dime, querido amigo: ¿QUIEN es tu nombre?

sábado, 11 de julio de 2009

Los pecados del padre

Por mi mente vagan fantasmas catódicos, imágenes de otros días. Escenas de películas sobre la pasión y muerte de Jesucristo, mezcladas en mi inconsciente con las charlas que nos daban en la parroquia los domingos por la tarde.

¿Has oído esta historia? Un amigo de un amigo me contó de cierto tipo, de firme educación católica.
A Ernesto (llamémosle Ernesto. Ernesto es un nombre mal aprovechado...) le dolían de vez en cuando las muñecas. Una molestia irritante, que solía venir después de una noche de borrachera, una dura discursión o una jornada de trabajo especialmente estresante.

Finalmente, y ya que los médicos no lograban darle solución alguna, terminó acudiendo a un curandero africano.

El chamán le preguntó sobre su infancia. Sobre sus padres y sus abuelos. Tras ello le hizo sentarse con las manos sobre las rodillas, le hizo fumar tabaco de algún tipo y, ayudado por una música relajante con notas tribales, le hizo entrar en trance.

Durante unos 10 minutos se dedicó a peinar su aura con las manos. Por último, con cuidado y firmeza, le cogió una de las muñecas y le sacó "algo". Después hizo lo mismo con la otra muñeca. Ernesto no sabía qué había hecho, pero se doblo de dolor y vomitó en el suelo.

El curandero le explicó que sus padres y profesores, con toda su superchería le habían hecho identificarse con el martirio de su "salvador", y que tras tantos años aún llevaba la huella energética de los clavos de cristo en su propia anatomía.
Así, cada vez que pecaba, su sentido de culpa le atormentaba, y se manifestaba de manera física, con dolor y sufrimiento.

Ernesto lloró durante más de 20 minutos, encogido en el suelo, a centímetros de su propio vomito. Una vez recuperado, le dio las gracias al chamán, le pagó y se fue.
Nunca más volvió a tener dolores...

Somos esclavos de nuestra cultura. Herederos de los pecados de nuestros padres.

¿Que ocurrirá cuando la avalancha nos alcance? Cuando todos los dioses y profetas de nuestros padres desaparezcan, como las huellas en la arena.

Quizás lloremos durante meses, años, y finalmente nos alcemos, más brillantes que nunca, y sigamos avanzando.
Quizás seamos tan cobardes que creemos nuestros propios mitos, nuestras propias supercherías a las que encadenarnos, y a las que clavarnos.

Yo hago la pregunta.
Que cada cual busque sus propias respuestas.

miércoles, 1 de julio de 2009

Scroll

Los avances se acumulan, el progreso se acelera, formando un haz de imágenes que resulta difícil seguir desde fuera.
El desarrollo científico viaja a la velocidad de la luz, pero la cultura popular y la psique de la masa no puede seguir dicho ritmo.

Vivimos limitados por las restricciones de nuestro cuerpo y nuestra conciencia, en un horizonte de avance rápido que hace tiempo que nos ha sobrepasado. En dicha circunstancia, abrumados por los cambios, somos náufragos del mar de la información, navegantes de la incertidumbre.
Las nuevas generaciones no tienen miedo.
No tienen tensiones ni estructuras preconcebidas.

El mundo gira a diferentes velocidades, y en la metrópoli, el cerebro de algunos se convulsiona espasmódicamente, a intervalos regulares. Una extraña epilepsia cultural adaptativa. Nada excesivamente problemático, en los albores de la nueva era.

sábado, 20 de junio de 2009

Arañando la superficie

Max Michael se rascó la espalda en la cocina, aún descalzo y sin camisa, mientras preparaba tostadas en la nueva Thermomix.

Esta mañana no le apetecía el Net-media mientras desayunaba. Deseaba aislarse durante unos minutos de las noticias globales y la música pop de los últimos 30 años.
La marea le alcanzaría de camino al trabajo, en el transporte público, desde luego, pero por un momento se sentiría parcialmente dueño de su mente y eso le agradaba.

Así pues, optó por probar el Lector Onírico que su novia le había comprado hacía una semana. Apartó un par de bolsas vacías abandonadas sobre la encimera para alcanzar el dispositivo principal, y sostener entre sus manos el aparato con formas suavizadas, de color metalizado.

- Elena ya sabe que mi color favorito es el negro - pensó fastidiado.- Ha elegido este modelo solo para putearme...

Una pequeña victoria para su amante. 1-0 a las 7 de la mañana.

Pulsó el botón de Actualización, y la pantalla de plástico SAW mostró un incomodo reloj de arena en alta definición, mientras el aparato cargaba los datos del dispositivo receptor instalado en su dormitorio.

Seleccionó el periodo de los 3 últimos días, y el programa le dio a elegir varias opciones de lectura.

El formato informe le atraía, pero optó por ser aventurero, y pulsó en la pantalla táctil el formato lírico, que tanto llamaba la atención en los anuncios del Net-media.

Segundos después, una modulada y agradable voz artificial le cantaba una versión parcialmente lírica de sus "Greatest hits" oníricos.

Esta empresa no tiene alma, ni sitio donde llorar.
El silencio apaga el llanto, pero no las ganas de despertar.
Los seres se revuelven, inquietos, dudando por el porvenir mientras la cabeza se separa del cuerpo,
orgullosa e indiferente a las otras partes.
Lleva lagrima y sonrisa pintadas a negro en el rostro,
como un jodido mimo.
Buscando las monedas del público, y aplausos que no se merece.


Max Michael colocó las tostadas en un plato de cristal descolorido y sorbió el café de la taza, pensativo.

-Demasiado poético para mi gusto- Afirmó irritado al aparato. Para colmo, el aparato ni siquiera tenía programas de registro de voz, y se mantuvo ahí parado en la encimera, como un pequeño animal autista incapaz de responder a sus acusaciones.

Acudió al cuarto de estar y buscó su Blackberry con la mirada, explorando la habitación. Le enviaría un mensaje insidioso a Elena, quejándose por el regalo.
Así equilibraría las cuentas en el partido cotidiano de afrentas y recriminaciones que llevaban desde hace meses.

1-1. Pensó, con una sonrisa traviesa en el rostro.
La mañana iba a ser larga.

martes, 16 de junio de 2009

La duda y el fuego

Te miro a los ojos y creo reconocerte.
Conozco a los de tu ralea.

Cobardes, con miedo a cambiar. Duda y humo.
Tan temerosos de dar el salto que permanecen toda la vida encogidos, pasando de un fracaso a otro.
El miedo a lo desconocido te amordaza, te paraliza, y prefieres morir a enfrentarte a tus demonios.

La rabia surge de mi interior. Un grito sordo que intento acallar sin éxito: ¡Te desprecio!, ¡te desprecio!, ¡te desprecio!
El rumor de mi decepción llena la sala, y deja tras de sí paz y lucidez.

No queda nada más entre nosotros. Nada antes del adiós.

Solo restan dos cuestiones para resolver la duda. dos incógnitas de poca importancia antes de separarnos para siempre.

Quién eres tú. Y que coño haces en mi espejo...

Y la sombra desapareció.

viernes, 5 de junio de 2009

Enajenamiento cotidiano

El sonido de la calle. las vibraciones de la vida moderna.
Un mundo que respira es un millón de probabilidades en movimiento.

¿Quién sueña al soñador?
Acaso la ciudad tiene sueños de ajetreos y penurias, transporte y atascos.

Y nosotros, ebrios de ignorancia, cumplimos nuestro papel: Corremos, luchamos y reímos, creyéndonos los reyes del tinglado.

sábado, 30 de mayo de 2009

Noches de hotel

Hotel Silken.
10ª planta. El mundo bajo sus pies.

Jaime observa la ropa desperdigada por la habitación, tan grande como la casa de un amigo suyo, de Carabanchel. El equipaje de la maleta se ha distribuido sobre los sillones, la cama, y la mesa, como un lienzo muy personal que intenta dar significado a la soledad del circunstancial morador de esas paredes.

Echan una pelicula por la televisión de pantalla plana: Halloween.
Una de esas putas pelis de psicópatas inmortales que rozan la paranoia y la comedia de serie B.
El asesino ha desaparecido de escena y vemos a la prototípica victima intentando huir de la casa. ¡Detrás de ti, imbecil! Centelleo metálico, sangre, otra cuchillada.
Y vuelta a empezar.

Por la mañana, Jaime absorbe la habitación como quien absorbe un perfume.
Inspira al pecho, y luego al abdomen, donde ya almacena el brillo de otros tantos hoteles.

Abre el armario y observa el traje negro y la corbata azul, intentando encontrar ánimos para integrarse en el mundo que ruge, allá abajo, a pie de calle.

Formación comercial, venta directa. Comerciales de colmillo retorcido, piratas y bucaneros, de esos que asaltan barrios residenciales buscando ancianas y subnormales, armados con su Blackberry, su agenda, y su decisión inquebrantable.

En los cursos, las relaciones de Jaime con los alumnos tienden a ser decididamente cordiales, y decididamente frías. Como los vasos envasados y el champú del hotel, diseñados para un único y satisfactorio uso por parte del cliente.

Los cursos de un solo día son los peores, piensa.
Con la agenda funcionalmente apretada para cumplir expediente y ahorrar presupuesto en horas de formador:
Presentación a las 09:00, herramienta de activación, descanso de 15 minutos, catálogo de productos, una hora para la comida, y técnicas de venta durante la tarde.

Cada día un grupo distinto, con sus propios listillos y graciosetes, sevillanos a poder ser. Toda la semana se convierte en una vorágine de dinámicas y presentaciones, viajes, noches de hotel y botellitas del minibar: Cuchillada, sangre, cuchillada. Y vuelta a empezar.

sábado, 16 de mayo de 2009

En las manos de Bel

Paseando por mi barrio, llego hasta Conde Casal.
En una sucursal del Santander veo carteles de la UGT.

Los discursos se acumulan contra el cristal. Entidades del ahora, a los carteles les gusta estar acompañados, hermanados unos de otros, como buscando el cariño y la comprensión que solo otro trozo de papel puede darte.

Rojo, negro y blanco: Albert Einstein convertido en un simbolo de la revolución. Si el genio levantara la cabeza.

Iconos propios de una religión sin dios, los mensajes caen en el mismo conflicto maniqueo y fútil que todas las otras sectas:
Un muerto de hace 30 años, a la postre resucitado para avivar la causa. Bolonia, como la última ignominia contra la que luchar. La privatización de la sanidad pública. Frente a la Crisis, ¡Lucha!
¿Contra qué? El cartel no lo señala.
Un par de esforzados camaradas, Adan y Eva, golpean con mazos a la crisis. Quieren derruir un evento histórico. Igual podrían bajar el sol a la tierra con las manos, o hasta hacer que el Madrid gane la liga...

martes, 12 de mayo de 2009

Una visita de cortesía

El hombre de las 09:20 miró a su alrededor aturdido, al entrar en la gran sala erizada de equipos. La torre sur había cambiado desde la última vez.

Crucé el espacio hacia la mesa de Ana, valorando con mirada crítica los nuevos rostros depositados en la arena por el viento. Equipos enteros habían migrado desde la visita de hace un mes.
Docenas de inquilinos desubicados, todos juntos, esperando hacer bien su trabajo.

Ana no estaba.
En compensación, Fernando alzó la mirada. -¡Heeey, tío!
-Que pasa, Fer. veo mucho movimiento.
-Si. Es el remplazo. -¿Remplazo? ¿Remplazo de qué?
-Los vivos. la diferencia entre estar quemado o producir.

Asentí con la cabeza, tratando de comprender. La mayoría de las veces, con eso basta...

Echando un vistazo, Logré reconocer a un par de tipos. Técnicos, Framework en tiempo real y todo eso.

Al fondo, la puerta de la sala de reuniones se abrió.

Ángel salió sonriendo, comentando algo con uno de los gerentes.
Comité de operaciones, demasiadas cabezas pensando al mismo tiempo, si quieres mi opinión.

-Que tal, David.- saludó.
-Un poco saturado. ¿Bajamos a tomar un café?

El bar de la calle era un espacio rutinario, fuente de seguridad y chismorreos.
En la oficina corrían un par de leyendas sobre el posible origen de la cicatriz en el cuello de la chica morena de tetas pequeñas, recluida para siempre detrás de la barra.

-¿Como van las ventas, genio?- planteé a mi amigo, una vez pedidos los desayunos.

Y me lo contó. Y entre confesión y confesión hablamos de perder el norte y gestionar el área de incertidumbre en la nueva era.

Ambos estuvimos de acuerdo: nos adentrábamos en terreno de nadie, y muchas de nuestras ideas dejaban de tener relevancia en el nuevo entorno.
Con todo, un nuevo mercado, maduro y nacido en la era de la tecnología de consumo, permitía la expansión de las nuevas tecnologías en el área pública: turismo, educación, etc.

-Es una puta carrera de coyotes y correcaminos.- bromeó.-Los clientes cambian y nosotros cambiamos tras ellos.

-Ya sabes lo que dicen.- proseguí el hilo.-Respeta al cliente, adora a tu Dios.

-¿Que hay en el fondo?- murmuraba, removiendo la cucharilla en una taza ya vacía.- La innovación, el nuevo modelo de venta...

-Imágenes huecas. Y laberintos sin salida.- Sentencié. Hoy me encontraba poético.

Sé adonde quería llegar. El miedo al vacío: No saber si todos los atajos y caminos creados conducirían a alguna parte. Dudar si más allá de la terminología y las estructuras mentales, nada de eso nos conduciría más cerca de Dios.

Personalmente había abandonado la búsqueda. Si la totalidad quería decirme algo, más le valía llamar educadamente a la puerta...

Girado hacia la entrada, observé el sol a través del cristal, capullo bienintencionado, iluminando de manera desinteresada la zona industrial, de dudosa belleza, en la que nos encontrábamos.

Hoy iba a ser un gran día. Joder, seguro que si.

martes, 5 de mayo de 2009

Una historia del absurdo

Fue un gesto espontáneo, que progresivamente fue seguido por todos.

La evaluación anual estaba causando estragos, y el aumento de las presiones respecto a la imputación de proyectos enrarecía cada vez más el ambiente.

Día tras día se hizo habitual entre los trabajadores ir a los servicios a gritar y golpear las paredes, liberando la rabia contenida desde hace meses.

Encerrados en el cubículo, gustaban de gritar a pleno pulmón contra la incompetencia de los gestores, la tonta restricción respecto a pedir adelantos, la innecesaria burocracia a la hora de pedir un curso de formación...

La Dirección valoró de manera neutra la situación, y optó por respetar la libre iniciativa de los trabajadores.

Poco a poco, los propios directores se sumaron a la catarsis, expulsando en los lavabos la frustración por los clientes que se empeñaban en pedir cambios de última hora, consultores júnior que llegaban una hora tarde, o las encuestas de satisfacción que dejaban en mail lugar a sus departamentos.

Con el paso de las semanas, los rostros se suavizaron, desaparecieron innumerables contracturas, y los conflictos entre áreas disminuyeron.

Al cabo de 6 meses, la productividad había aumentado un 21%.

martes, 28 de abril de 2009

El gran personaje

La crisis es el gran personaje de los nuevos tiempos.

Aparece en las noticias, en los anuncios, le dedican series de televisión...

¿Como es en persona? ¿Es hombre o mujer? ¿Acaso es alto y delgado?

En ciertos momentos me imagino una figura gris, otoñal y opaca, trajeada de escrupuloso negro sin corbata, mirando a su alrededor con mirada analítica y una pose de crueldad.

Sábado por la noche: Utilizo el ordenador para conectarme a la red y ver las noticias. Me entero de que Nodalia ha caído.
Imagino incertidumbre entre los trabajadores, escepticismo y desengaño.

-¡Enhorabuena!, Ya no tienes trabajo. Ahora eres un agente libre.-
Sonrisa luminosa, capaz de vender motos en una convención de paralíticos...

Al menos el señor Crisis trabaja rápido, me reconozco a mí mismo, intentando mantener el buen juicio y valorar las cualidades del adversario.

Vuelvo a leer la noticia y dirijo mi atención a los trabajadores de Nodalia. Adivino una masa de personas anónimas, temporalmente colapsadas, cargadas de sueños rotos.
-Buenas noches, y buena suerte- Musito, a quien quiera oírme, y a la nada.
Apago el ordenador.

sábado, 18 de abril de 2009

Tensión superficial

La crisis multiplica la tensión social.
Las emociones son líquido inflamable, mientras el paro aumenta mes a mes, y el gobierno manifiesta falta de capacidades para afrontar la situación.

Perdida de confianza en las instituciones. Mayor tensión grupal.

Las energías se concentran. La mirada acude al plano material, y se encuentra con docenas de comentaristas, muy profesionales, que repasan la situación con un rictus de preocupación en la cara. (Sin rictus de preocupación, las situaciones de crisis, ni son situaciones, ni son nada...)

El pueblo se mueve, incomodo. el gran conquistador, el dictador de la fuerza ciega.

Asesinan a una niña en Sevilla. La gente sale a la calle, pidiendo el endurecimiento de las penas. Hay quien habla de la pena de muerte.

Algunos fatalistas piensan que podría haber estallidos como los de Grecia. Hipótesis sin base alguna. Pero más vale hablar, y hacer aspavientos con la mano, como los demás, que parecer tonto y despreocupado.
- Que no te enteras, joder, Que no te enteras.

Hay que preocuparse, si señor. Criticar a los banqueros, a los empresarios, a los inmigrantes... ¡Y reclamar la tercera república!
Los sueños imposibles se venden mejor esta primavera.

La confusión es un paso inevitable. Cambiadas las condiciones del sistema, el organismo plural necesita tiempo para reestructurarse. Nuevo medio, nuevo orden.

Con suerte, superados los temores, el nuevo espíritu renovador surgirá entre la masa informe. Evolución social a golpe de machete. El esperpeto gana altura, sudor y lagrimas en la corte del rey Juan Carlos.

domingo, 5 de abril de 2009

Input y output

Esta no ha sido una buena semana. Las decepciones me lastran, como parásitos adheridos a mis órganos vitales.
Quizás estoy disperso, quizás me encuentro desmotivado. Quizás pienso demasiado. Quizás.

La rabia se acumula en mi abdomen, haciéndome estar brusco, cometer errores. Vuelvo a ser esclavo, esclavo de mis adicciones: Adicto al autosabotaje, adicto a quemar las naves, adicto a perder el control de mi poder.
Y dejar que mis acciones giren en torno a las acciones de los demás, como estupidas polillas encandiladas.

Me siento un organismo confuso, quebrado. Software dañado. Mod quemada. Avatar con el módulo de personalidad desgastado.

¿Has tenido ese sueño? Ves el vaso al borde de la mesa, colmado de agua. La gente se mueve, inconsciente, por encima del momento. Solo deseas que se caiga el vaso de una vez, para recoger los pedazos y pasar a hacer algo productivo...

El tiempo camina, la semana finaliza. Y al cabo, dolorido, sigo adelante.

Ando a través de la larga avenida, intentando aprender algo de la experiencia, tomar más control de mí mismo. Ser más consciente, éxito arrollador.

Modelado de procesos internos. Input y output.
Optimización del sistema.

domingo, 29 de marzo de 2009

El fuego que no cesa

¿Cuales son las reglas del juego?
Comunicaciones oficiales, reuniones multitudinarias. Canapés. Cervecitas con los compañeros de oficina.
Rumores. la pregunta que todo el mundo se hace y que nadie responde.

Tan duro es. Aceptar que somos diferentes. Que LA VERDAD no es nuestra verdad.

Asumir que eres único. El fantasma de la soledad susurra en tu oído, aislado en la multitud. Cabezas inclinadas, mirando ordenadores portátiles. Equipamiento alquilado con fecha de caducidad.

Y al final, ¿que salida nos queda?
Tirar por el suelo las ideas al las que nos aferramos como propias. Atreverse a evolucionar. Ser humilde. Servir al designio. Quién y cómo: basura racional, para niños pequeños. Pensar no te va a salvar el culo...

La energía se mueve. El dragón despierta. Déjate llevar.
Acción emocional, pragmatismo radical: actúa, actúa, actúa.

Inteligencia e ideas aplicadas al mundo real.

La ola sacude el mundo. Avalancha que cambia la realidad.

domingo, 8 de marzo de 2009

La sonrisa del gato

Crisis de la economía real. Crisis financiera:
El gobierno levanta expectación, 46 millones de personas pendientes de él.

Ayudas al sector financiero, presiones. Se habla de nacionalizar la banca. Tentación y deseo.

Hay sobre la mesa importantes capitales. La voluntad manda, e impone. Tiene la legitimidad de su lado. Actua con fuerza.

Posible transformación material. El peso del pasado condiciona el juicio de los hombres. 62 millones de deuda en 2005.

El marco histórico nos hace ver alianzas y afectos establecidos durante años. ¿Cuales son los lazos estables del partido?

La situación material determina los argumentos, condiciona los juicios. La duda se impone ante la política. La fé se agota con el tiempo.

Una sonrisa irónica se esboza. Lucidez caustica que lo ilumina todo...

domingo, 1 de marzo de 2009

Esas pequeñas batallas de primera hora de la mañana

Nervios antes de entrar a la sala. Repaso mental de los argumentos a favor de nuestro proyecto.

Mesa redonda erizada de portátiles y cables.
3 o 4 rostros compartiendo el espacio. Amigos o enemigos. ¿Quién puedes saberlo?

Reuniones a puerta cerrada. Las fuerzas creativas se acumulan. Se desarrollan los cimientos de cualquier obra.

Invirtiendo las energías. Poniendo todo el empeño.
Te sientes cómodo. Seguridad creativa que conduce al estancamiento.

Responsabilidades, trabajo. Negociación a cara de perro.
El peso de lo oculto puede parar el desarrollo de los proyectos.
La duda que carcome. Invertir más o acomodarse a la situación.

No pierdas el norte. No quedes en evidencia. Solo es la preparación antes de la gran batalla. ¿Has aprendido algo después de todo este tiempo?

Cayendo siempre, como niños, en el mismo error: Confundir el calentamiento con el momento cumbre de la carrera.

viernes, 20 de febrero de 2009

Versus

Esperanza.

Disputas en la comunidad. Pugna en el centro de la telaraña.
La red se convulsiona. Epilepsia en el centro político del reino.

Los eventos del pasado se acumulan, rencores y cadáveres de otros días, amenazando con varar los mejores barcos.

¿Acaso puede superarse toda la historia en común? Encontronazos y discursos con doble sentido.
El pueblo aplaude, entretenido. Sangre en la arena. Pan y circo.

La situación material, equilibrio de poderes, obliga al entendimiento. Apagar y encender. Ser inteligentes. Fríos.

La estrategia se sobrepone a las entrañas.
Quizás en el futuro cercano surja la alianza, el frente común.

Triunfo rápido, catarsis política.

Una nueva fuerza hace que tiemble el reino. Victoria aplastante.

Gallardon.

sábado, 14 de febrero de 2009

Lo que un genio le dijo a otro

Y cuenta la historia que 2 trabajadores de una lejana empresa se encontraron un día en la cafetería.

-¿Que tal estas?- Le preguntó uno de ellos a su amigo.

La cara del trabajador más joven se ensombreció.
-La verdad, estoy muy molesto. la relación con mi jefe no es buena.
Continuamente pone más trabajo encima de mi mesa, sin respetar mis tiempos de producción, me critica duramente al menor error que tengo, y nunca reconoce los éxitos que consigo.

-Entiendo... Y cuando tu jefe te da más trabajo del que puedes gestionar, o te critica en exceso cuando cometes un pequeño error, o no valora tus logros, ¿hablas con él y le muestras tu punto de vista?

-No. Me callo y me trago la rabia. Lo que me frustra aún más.

-Comprendo.- Aseguró el trabajador más viejo. -¿Y has hablado con él para hacerle saber cómo te sientes?

-No. Ya te digo que la relación es muy tensa. Tengo la impresión de que, si hablo con él, puede que ambos nos "calentemos durante la conversación, y el conflicto se vuelva irreconciliable.

Entonces el trabajador más viejo se enderezó y, emulando la voz de alguien más digno parafraseó:
-Entonces de verdad te digo que prefieres ser ninguneado y trabajar bajo presión antes que enfrentarte a tus miedos y defender tus intereses ante tu jefe.
Y la situación no mejorará hasta que superes tus miedos y hables con él.

Y el trabajador más joven vio que había verdad en sus palabras, y las escribió en su diario.
Y su vida mejoró.

Y así me llegó la historia, y así os la he contado.

jueves, 5 de febrero de 2009

Motivos para estar contento

Año nuevo, vida nueva.

Pasan los meses y me encuentro en el 2009, un año que hay que temer, según muchos.

Sin embargo, personalmente me siento dichoso por el momento que vivo.

Salud, dinero y amor, que decía la canción. -¡Y trabajo!- dice algún otro avispado desde el rincón, y yo le sonrío, y le doy toda la razón...

Las cosas me van bastante bien hoy por hoy. ¿Por qué debería llorar y aparentar pesadumbre cuando mi pecho late con fuerza?

2009 es un año lleno de posibilidades, y ni siquiera la crisis puede llenar con sus nubarrones el cielo.

Los retos desvelan la verdadera naturaleza de los hombres, más allá de las poses acomodadas y las citas memorizadas de libros que otros escribieron.

Veamos de qué estamos hechos.

Un saludo.